Bikurim

El Reino de Adonai se rige por Principios, Instrucciones espirituales, dadas por el Rey, el Creador del universo y el Soberano de las naciones. Él tiene ciclos de bendición, mientras que el adversario, utiliza ciclos de destrucción (Juan. 10:10).  Y Adonai quiere que Sus hijos seamos entendidos de los tiempos, para que disfrutemos de Su continua y creciente bendición.

Un principio es una ley o regla que se cumple o debe seguirse con cierto propósito, como consecuencia necesaria de algo o con el fin de lograr un propósito.

¿Cuál es el propósito de entregar las Primicias?

Proverbios 3:9-10 “Honra a IHVH con tus bienes, Y con las primicias de todos tus frutos, Y tus graneros se henchirán de abundancia, Y tus lagares rebosarán de mosto”.

La importancia de esta gran festividad de Bikurim, es que nos recuerda de forma contundente de quien dependemos y a quien nos debemos. Esta convocatoria es la lectura de acciones concretas de agradecimiento y reconocimiento, al apartar “lo primero” para el dador de todas las cosas. Este principio lo vemos expresado en la Toráh y a lo largo nuestra historia, como lo vemos en los siguientes textos:

Deuteronomio 6:4-6 “Oye, Israel: IHVH nuestro Elohim, IHVH, uno es. Amarás a IHVH tu Elohim con todo tu corazón, con toda tu alma, y con toda tu fuerza. Estas palabras que te ordeno hoy, han de permanecer sobre tu corazón”

Deuteronomio 8:11-18 “Cuídate de no olvidarte de IHVH tu Elohim, para cumplir sus mandamientos, sus decretos y estatutos que yo te ordeno hoy; no suceda que comas y te sacies y edifiques buenas casas en que habites, y tus vacas y tus ovejas se aumenten y la plata y el oro se te multiplique, y todo lo que tuvieres se aumente; y se enorgullezca tu corazón: Mi poder y la fuerza de mi mano me han traído esta riqueza. Sino acuérdate de IHVH tú Elohim, porque él te da el poder para hacer las riquezas, a fin de confirmar su pacto que juró a tus padres, como en este día”.

Éxodo 22:29-31 “No demorarás la primicia de tu cosecha ni de tu lagar. Me darás el primogénito de tus hijos. Lo mismo harás con el de tu buey y de tu oveja; siete días estará con su madre, y al octavo día me lo darás. Y me seréis varones santos”

Deuteronomio 26:2 “Tomarás las primicias de todos los frutos del suelo que coseches en la tierra que Adonaí tú Elohim te da, y las pondrás en una cesta, e irás al lugar que Adonaí tú Elohim haya escogido para hacer habitar allí su Nombre”

2ª Crónicas 31:4-5: “Ezequías mandó también al pueblo que habitaba en Jerusalén, que diese la porción correspondiente a los sacerdotes y levitas, para que ellos se dedicasen a la ley de Adonai. Y cuando este edicto fue divulgado, los hijos de Israel dieron muchas primicias de grano, vino, aceite, miel, y de todos los frutos de la tierra; trajeron asimismo en abundancia los diezmos de todas las cosas.

Deuteronomio 8:8 “una Tierra de trigo, cebada, vid, higueras y granados, Tierra de olivos de aceite y miel de dátiles;”

¿Qué significan estas cosechas?

1) “Trigo” - Trascendencia: Este es uno de los grandes misterios de la condición humana: ¿por qué nunca estamos contentos por simplemente estar? Siempre buscamos “mas”: para descubrir un nuevo mundo o para llegar a otro nivel. No nos satisfacemos con sólo saber dónde estamos, también queremos saber de dónde venimos y hacia dónde vamos.

2) “Cebada” – Vitalidad:  Nuestra trascendencia tiene una melliza, nuestra vitalidad animal. Mientras el ser animal sea sin aspectos negativos, como ser cruel o egoísta, la individualidad tiene sus puntos positivos también: la fuerza de voluntad, la pasión y energía que el ser más “espiritual” nunca tuvo. El Secreto, por supuesto, es canalizarlo a los lugares correctos.

3) “Uvas” – Alegría: Una persona alegre es un libro abierto. Todo brota, su personalidad está libre, sin inhibirse. La alegría rompe las barretas, tanto internas como externas, imaginarias o reales.

4) “Higo” – Conciencia: Conocimiento es más que poder: Es la habilidad de involucrarse completamente en las acciones y vida de uno. Una acción realizada con ignorancia es una puñalada en la oscuridad, una acción nacida de la conciencia es eficiente.

5) “Granada” – Acción: Hay veces en el que el imperativo es simplemente: ¡Haz!, la habilidad de actuar porque la acción es requerida, incluso si no hay conciencia o entendimiento.

6) “Aceitunas” – Lucha: Hay otro gran misterio en el ser humano: El hecho de que estamos en nuestra mayor innovación cuando nos enfrentamos con límites y constricciones. Estamos en nuestro mejor momento cuando estamos presionados. Esta es la sexta cualidad del alma, representada por la aceituna, el poder de traducir el reto y adversario a una fuerza poderosa para la transformación y el rendimiento…

7) “Dátil” – Tranquilidad: Más profundo que la “aceituna”, está el “dátil” del alma: La tranquilidad y perfección que nada puede perturbar. Y esta armonía no solo se encuentra en el alma, sino que tenemos el poder de llegar a ella y crear para nosotros un espacio de inmutable verdad y paz perfecta en medio de las tormentas que golpean nuestras vidas.