Panes sin Levadura

Esta festividad abarca siete días, siendo el primero y el ultimo de esos siete días, días de santa convocación. En esos siete días El Señor nos ordena comer panes sin levadura, no comer nada leudado ni tener algo leudado en nuestras casas.

Sin embargo, no solo estamos llamados a abstenernos de comer o tener en nuestras casas algo leudado; también estamos llamados a analizarnos e identificar en nuestro interior (es decir, en nuestra alma) todo aquella “levadura” que tengamos y eliminarla de nuestras vidas.

En las Escrituras, la levadura representa toda aquella cosa que nos aparta de El Señor (el pecado); por ejemplo:

1. La Jactancia:

1Corintios 5:6 “No es buena vuestra jactancia, ¿no sabéis que un poco de levadura leuda toda la masa?”

2. La malicia y maldad:

1 Corintios 5:8 Así que sigamos celebrando la solemnidad, no con la vieja levadura, ni con la levadura de malicia y de maldad, sino con ázimos de sinceridad y de verdad.

3. La hipocresía:

Lucas 12:1 “Entretanto, se habían aglomerado miles y miles de la multitud, hasta el punto que se pisoteaban unos a otros. Entonces comenzó a decir primero a sus discípulos: Guardaos de la levadura de los fariseos, que es la hipocresía”.

3. Las enseñanzas en contra de la Toráh:

Mateo 16: 6-12 “Iehoshúa les dijo: Cuidaos y guardaos de la levadura de los fariseos y saduceos. Ellos entonces razonaban entre sí, diciendo: Es porque no trajimos panes. Sabiéndolo Iehoshúa, dijo: ¿Qué estáis hablando entre vosotros, oh faltos de fe, de que no tenéis panes? ¿No entendéis aún? ¿No recordáis los cinco panes de los cinco mil, y cuántos cestos recogisteis? ¿Ni los siete panes de los cuatro mil, y cuántas canastas recogisteis? ¿No entendéis que no os hablo acerca de panes, sino de guardaros de la levadura de los fariseos y saduceos? Entonces entendieron que no les decía que se guardaran de la levadura de los panes, sino de la enseñanza de los fariseos y saduceos.

Por otro lado, los ázimos (panes sin levadura) en la Escritura representan a Iehoshúa El Mesías, pues nunca “leudo” (peco); también representan la sinceridad y la verdad.

Que estos siete días de Panes sin Levadura, sean días que sirvan como entrenamiento para caminar con seriedad y sinceridad en la verdad que El Señor ha plasmado en su Palabra y a dejar de lado todas aquellas cosas que nos impiden ser uno con Él y cumplir con la demanda de ser personas a la estatura de Iehoshúa El Mesías.